Entre la dulzura y la disciplina: cómo aprender a habitarte con estructura sin perder tu magia

Una reflexión sobre estructura, intuición y el arte de sostenerme

Hubo un tiempo en que todo en mí se movía desde la estructura.
Todo estaba ordenado, planificado, bajo control.
Mi energía era predominantemente masculina.
Y aunque eso me trajo logros, también me desconectó de algo esencial.

Cuando comencé Moonwitch Essentials, entré —sin buscarlo— en un nuevo ritmo.
Uno más intuitivo, más fluido, más femenino.
La disciplina se volvió escurridiza.
Y por primera vez, ya no había nadie más presionándome para tener resultados.
Era solo yo… conmigo.

Y en ese “solo yo” me vi.

Vi cómo sé maternarme con dulzura:
me doy paz, espacios suaves, rituales con mis velas, mis cartas, mis aceites.
Puedo nutrirme, sostenerme emocionalmente, crear belleza a mi alrededor.
Pero paternarme… esa ha sido otra historia.

Esta semana, en una sesión de mapa existencial con constelaciones familiares, lo vi más claro:
mis padres ya hicieron su parte.
Ahora me toca a mí sostenerme.
No desde el juicio.
Sino desde la responsabilidad amorosa.

Paternarme, para mí, no es exigencia ni rigidez.
Es darme estructura sin violencia.
Es decirme “sí” a mis sueños con acciones concretas.
Es mostrarme, aunque no sea perfecta.
Es confiar en que la constancia también puede ser cíclica, intuitiva, viva.

💫
Estoy trabajando con resistencia.
La siento en mi cuerpo.
Esa parte que se asusta de mostrarme tal como soy,
que quiere que todo esté “listo” antes de salir allá afuera.
Pero también hay una parte en mí que quiere ser vista.
Mi luna en Leo me recuerda que ser vista no es vanidad:
es expresión del alma.

🌿 Para acompañarme en este proceso estoy usando:

• Suero facial Expansión, cada mañana, para conectar con mi energía masculina desde el cuidado.

• Roll-on Expansión, que llevo en mi bolsa, como ancla diaria de dirección y coraje.

• Roll-on Yin Yang, para recordarme que no se trata de elegir entre lo femenino o lo masculino, sino de integrar, de honrar ambas.

Estoy aprendiendo que la disciplina también puede verse como ritual.
Que puedo ser constante si lo hago desde el disfrute.
Que escribir mi journal, sacarme una carta, encender una vela… también es mostrarme.
Y que no necesito hacerlo perfecto.

Messy action is better than no action.
Y estoy empezando a amar la belleza del desorden honesto.

Si tú también te sientes así —suave, poderosa y a veces desorganizada—
te abrazo.

Recuerda:
Paternarte no es obligarte.
Es darte la dirección que tu alma ya conoce.

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Productos que me están acompañando en este proceso:
🌿 Suero facial Expansión
🌞 Roll-on Expansión
🌗 Roll-on Yin Yang

💌 ¿Te gustaría explorar tu propia energía interna en sesión?
Te acompaño a través del tarot terapéutico para conectar con tu verdad y sostenerte desde ahí.

 

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A reflection on structure, intuition, and the art of holding myself

 

There was a time when everything in me moved from structure.

Everything was organized, planned, under control.

My energy was predominantly masculine.

And while that brought accomplishments, it also disconnected me from something essential.

When I began Moonwitch Essentials, I stepped—without meaning to—into a new rhythm.

One that was more intuitive, more fluid, more feminine.

Discipline became slippery.

And for the first time, there was no one else pushing me to deliver results.

It was just me… with myself.

And in that “just me,” I saw myself.

I saw how I know how to mother myself with gentleness:

I give myself peace, soft spaces, rituals with my candles, my cards, my oils.

I can nourish myself, hold myself emotionally, create beauty around me.

But fathering myself… that has been another story.

This week, during an existential mapping session with family constellations, things became clearer:

my parents already did their part.

Now it’s my turn to hold myself.

Not from judgment.

But from loving responsibility.

To father myself, for me, isn’t about pressure or rigidity.

It’s about giving myself structure without violence.

It’s saying “yes” to my dreams through concrete action.

It’s showing up, even if I’m not perfect.

It’s trusting that consistency can also be cyclical, intuitive, alive.

💫

I’m working with resistance.

I feel it in my body.

That part of me that’s afraid to be seen just as I am,

that wants everything to be “ready” before I show myself to the world.

But there’s also a part of me that wants to be seen.

My Leo moon reminds me that being seen is not vanity—

it’s soul expression.

🌿 To support myself through this process, I’m using:

• Expansion facial serum, every morning, to connect with my masculine energy through care.

• Expansion roll-on, which I carry in my bag, as a daily anchor of direction and courage.

• Yin Yang roll-on, to remind myself that it’s not about choosing between the feminine or the masculine, but about integrating—honoring both.

I’m learning that discipline can also look like ritual.

That I can be consistent if I move from joy.

That journaling, pulling a card, lighting a candle… is also a way of showing up.

And that I don’t need to do it perfectly.

Messy action is better than no action.

And I’m beginning to love the beauty of honest messiness.

If you’re feeling this way too—soft, powerful, and sometimes a little disorganized—

I’m holding you close.

Remember:

Fathering yourself is not forcing yourself.

It’s giving yourself the direction your soul already knows.

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Products supporting me through this process:

🌿 Expansion facial serum

🌞 Expansion roll-on

🌗 Yin Yang roll-on

💌 Would you like to explore your own inner energy in a session?

I’ll guide you through therapeutic tarot to help you connect with your truth and hold yourself from that place.